La Devastación del Patriarcado

La Carencia y la Castración del Deseo Materno, Desde la mirada de Casilda Rodrigañez

Semana Mundial del Parto Respetado 2014

Conversatorio: Cuentos de Parto

Ciclo de Cine-Foros "Por El Poder de Parir". Entrada Libre

Venezuela conmemora la Semana Mundial del Parto Respetado. Organización Auroramadre convoca debate sobre la maternidad

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El Nacimiento de Abril

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sábado, 7 de julio de 2012

Agenda política de las mujeres para el próximo Plan de Gobierno revolucionario


La agenda política de las mujeres para el próximo Programa de gobierno bolivariano y socialista del presidente Hugo Chávez será discutida en un conversatorio que se efectuará en la Universidad Bolivariana de Venezuela. Este encuentro tiene como propósito enriquecer y mejorar el documento que se elaboró el 4 de junio con la presencia de más de 400 integrantes del Consejo Patriótico de Mujeres y que incluye las reflexiones que se vienen discutiendo en todo el país desde el año 2011.

El Consejo Patriótico de Mujeres realizó su propuesta a partir de 8 puntos: Nueva ética Socialista, Suprema felicidad social, Democracia protagónica, Modelo productivo socialista, Nueva geopolítica Nacional, Venezuela potencia energética, Nueva geopolítica Internacional y Fortalecimiento de la defensa nacional.

Este encuentro se realizará en la Universidad Bolivariana de Venezuela, sede Los Chaguaramos, Caracas, el 18 de julio en el Salón Amuay, a las 2:00pm.


La agenda política de las mujeres se fundamenta en:

  • El socialismo y el feminismo tienen una raíz ética común, basada en los principios de la igualdad, la dignidad, la solidaridad, el humanismo y la autodeterminación. 
  • La erradicación del patriarcado es parte integral de la lucha contra el capitalismo, en tanto el primero es inherente a la sociedad de clases, por lo que una sociedad socialista tal forma de opresión debe dejar de existir. 
  • En el capitalismo las mujeres no son reconocidas ni consideradas en el contrato social ya que el mismo reproduce la milenaria cultura patriarcal. Por eso no es posible construir una sociedad socialista sin feminismo.
  • La visibilización de lo femenino en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela abre el camino para la construcción de una ciudadanía con equidad e igualdad de género, etnia y clase con conciencia de patria. 
  • El socialismo feminista es transformación radical y cambio civilizatorio fundamentado en la sostenibilidad y reproducción de la vida misma. El socialismo feminista es la materialización de la equidad e igualdad de género, basado en la democracia participativa y protagónica de las mujeres y hombres de nuestra sociedad. 
Para leer el documento haz click en el siguiente enlace

lunes, 2 de julio de 2012

Maternidad y juventud

Cultura patriarcal: raíz de la violencia

Por Jenny Soto

¿Quién te manda a ser madre tan joven?, ¿eres estudiante o madre?, ¿Por qué no pensaste en eso cuando lo estabas haciendo?, ¿No creas que porque tienes un bebé vas a pasar la materia fácil?, ¡Qué cochina, esa bebé tan grande todavía toma teta! y ¿se la vas a dar aquí delante de todo el mundo?

La lista de preguntas como estas es larga y pudiéramos continuar con más frases célebres creadas por la cultura machista que nos ha invadido desde hace siglos, esto denota una postura ignorante respecto a un tema tan cercano, que cada ser humano ha vivido, porque todos y todas venimos de una madre.

Estas preguntas jamás las harían si quien llevara a un bebé fuera un hombre alto, fornido y capaz de defenderse mediante la fuerza física.

La maternidad debería ser algo respetado, dignificado, valorado, protegido, realzado, algo que nos llene de orgullo a las mujeres y nos haga sentir poderosas, conscientes del milagro de dar la vida, de tener poder sobre nuestros cuerpos, sin embargo, en esta sociedad la maternidad se convierte en una excusa más para discriminar, juzgar e invisibilizar la importancia del rol biológico y social de la mujer.

Está tan naturalizada la violencia que incluso nosotras mismas justificamos la bofetada, nos quedamos impotentes, con la rabia por dentro, sin la mayor disposición de gritar y de unirnos con nuestras hermanas, hablar de lo que nos pasa y al menos intentar cambiar esta situación que padecemos.

Yo particularmente, como mujer que ha luchado por criar con respeto en medio de tanta hostilidad, he experimentado ser madre a los 22 años, mientras curso mi carrera universitaria y cada una de estas preguntas y otros comentarios despreciables me los han hecho  profesores, compañer@s en el salón de clases y hasta gente desconocida en la camionetica, en el metro, etc…

Con toda esta exposición no quiero decir que las madres necesitamos ser tratadas como víctimas o como personas con cierta minusvalía, solo quiero decir que lo que está mal es el sistema capitalista y patriarcal, no nuestra maternidad, ni nuestros hijos en el salón de clases o en el trabajo.

Nuestra maternidad no está distanciada del resto de los roles que cumplimos las mujeres, somos madres, estudiantes, trabajadoras, militantes revolucionarias, lideresas comunitarias y todo lo hacemos por una vocación de amor al prójimo. Gestamos y criamos a quienes queremos que sean el hombre y la mujer nueva con valores de solidaridad, de hermandad y de amor.

Todos los entornos de trabajo o estudio deben estar adaptados y preparados para la presencia de los hijos e hijas de las estudiantes y trabajadoras. Cuando proponemos la crianza en tribu, queremos visibilizar la responsabilidad de la sociedad en posibilitar el encuentro y la unión entre los bebés y su familia. Este no es un asunto individual para atender, se trata de la construcción de la patria-matria. La cultura patriarcal es la raíz de la violencia.

Seres recibidos a través de una cesárea innecesaria, o un parto violento, puestos en un reten desprendidos de la lactancia materna, depositados en una guardería durante todo un día, criados con tv, con un padre afectivo ausente, castigados con golpes, gritos y tratos humillantes. ¿De qué otra forma podemos torturar mas a un ser humano? erradicar todo esto y centrarnos más en los afectos y en la familia es la tarea que se debe cumplir para que empecemos a ver al hombre y a la mujer nueva.

Todos  y todas somos responsables de apoyar y acompañar cada vida…

 Maternidad en capitalismo: lucha contracorriente

Por Jenny Soto

El sistema capitalista, por ende machista, le asigna a la mujer la maternidad como un rol impuesto de forma indigna. En primer lugar existe una intensa presión para que las mujeres asumamos el trabajo de la reproducción y cuando finalmente lo asumimos y queremos disfrutarlo, nos convertimos en madres invisibles, abandonadas y luchadoras contracorriente.

Un ejemplo de ello es que para que la nueva Ley Orgánica del Trabajo reconociera legalmente nuestro derecho a un postnatal más prolongado, las mujeres venezolanas tuvimos que dar una fuerte lucha política, pero la lucha continúa porque hubo un avance pero en realidad se necesita más aún.

Es así como la maternidad se convierte en otro medio para acentuar la violencia y la discriminación hacia las mujeres, a quienes les cuesta más que a los hombres lograr de forma igualitaria un desarrollo profesional y económico.

En un sistema capitalista existen pocas posibilidades para una maternidad digna, respetada y para la crianza en comunidad, cuestión que se debe asumir como tal por ser un asunto político, pues se trata de los futuros ciudadanos y ciudadanas de la patria. De la formación que ellos reciban depende que nuestra sociedad esté constituida por seres humanos con autoestima, con amor para dar al prójimo, con fuerzas para luchar por la revolución o por seres humanos violentos, machistas y con baja autoestima, quienes repetirán las conductas destructivas que vieron como imagen ideal del éxito y para quienes se construirán más cárceles, tratamientos antidrogas o clínicas siquiátricas.

El contacto estrecho que deben tener los bebés con sus familias se ve obstaculizado en este orden social. Así vemos como en las maternidades los bebés tienen contacto en primer lugar con un médico desconocido y un biberón, en lugar de ser recibidos por las manos de su padre y ser colocados en el pecho de su madre de inmediato. Luego vemos como desde muy pequeños los bebés son depositados en guarderías durante 8 horas y al llegar a casa los espera la televisión con su carga violenta y alienante.

Las madres que queremos tener un parto digno y criar con apego, atendiendo las necesidades de nuestros bebés, sin que nuestro rol de madres esté reñido con nuestra participación en el entorno público, tenemos todo un sistema en contra y luchamos contracorriente.

No se llevan estadísticas de cuantas madres solteras se ven obligadas a detener su sueño de formarse en la universidad por tener que trabajar para mantener a un hijo o hija. Por el contrario, conocemos muy pocos hombres que se retiran de sus estudios o que les cuesta ascender en cargos en su trabajo por cuestiones de crianza.

Toda la sociedad debería acompañar el proceso de crianza, una forma sería creando salas de lactancia en todos los centros de trabajo y de estudio y lugares para el cuidado infantil con la participación de padres y madres formados.

En las comunidades deberían existir grupos de apoyo y de formación para padres y madres, consejería en lactancia materna, en asuntos de pareja y de crianza y salas para partos de bajo riesgo atendidas por parteras profesionales, quedando los hospitales solo para emergencias.

La maternidad no es un negocio, pero en eso lo ha transformado el capitalismo. Las cesáreas innecesarias, los partos medicalizados, los biberones, las formulas, los accesorios inútiles, los pañales desechables, las guarderías, las medicinas por enfermedades evitables con lactancia materna, son todos síntomas de esta perversión.

Además, en este orden impuesto, se discrimina y se presiona a la mujer por faltar al trabajo por atender cuestiones de crianza, dificultades para estudiar, trabajar y criar etc. negándosele de esta forma el espacio y la posibilidad de cuidar la vida para la paz y la transformación del mundo.

domingo, 1 de julio de 2012

COLECTIVO CRIANZA EN TRIBU UBV

¿Quiénes somos?


Somos un colectivo que nace por iniciativa de la comunidad de la Universidad Bolivariana de Venezuela, estamos conformados por madres y padres estudiantes, trabajadores y trabajadoras que asumimos la crianza como una forma de transformar el mundo.





¿Cómo surgimos?


Esta iniciativa surge de nuestra propia experiencia de maternidad y paternidad en un sistema capitalista que obstaculiza la equidad de género en la crianza y el encuentro de los bebes con su familia.


Surgimos de la consciencia política que nos ha despertado la revolución bolivariana y la lucha feminista, por nuestra necesidad como madres y padres de desarrollarnos personal, profesional y políticamente sin descuidar las necesidades  de nuestros hijos e hijas.


Surgimos de la reflexión sobre el significado de la (pa)maternidad, el valor que tiene para nosotr@s y la sociedad. ¿Por qué se convierte en una opción de vida y cuáles son las subjetividades en torno a esto? Reflexionar si la (pa)maternidad es una decisión consciente o inconsciente.

¿Qué hemos hecho?



Hemos organizado un equipo de trabajo para sensibilizar a la comunidad ubevista con respecto a la importancia de la (pa)maternidad, así como de la transformación hacia una estructura no adultocéntrica adaptada a la presencia de niños y niñas en nuestros espacios de trabajo y estudio.


Entre nuestras propuestas específicas está la creación de un lugar de cuidado para los hijos e hijas de la comunidad ubevista. Para esto hemos realizado reuniones  de las que han surgido estrategias y acciones  que están en proceso de ejecución.


Hemos emprendido una propuesta formativa para promover la reflexión en torno a la crianza como un asunto político y la valoración de la maternidad y la paternidad con un enfoque de equidad de género.


En función de esto, hacemos uso de las redes sociales, blogs, realizamos foros, conversatorios e investigaciones.

¿Cuál es nuestro objetivo?



Nuestro objetivo es combatir al capitalismo y desmontar el paradigma patriarcal del estilo de vida, de crianza y de relaciones sociales a través de la construcción del socialismo feminista.


Demandas por las que luchamos 
y propuestas en ejecución:


- Un lugar de cuidado dentro de la universidad para los niños y niñas que vienen a clases con sus madres o padres, trabajador@s y estudiantes.
- Una sala de lactancia materna
- Un lactario
- La creación de grupos de acompañamiento pre y post natal
- Talleres de formación pre y post natal
- Atención integral a la violencia contra las mujeres (Asesoría jurídica, apoyo sicológico y emocional)
- Inclusión de la perspectiva de género en el currículo académico de todos los programas de formación de grado de la UBV.
- Establecer métodos de evaluación académica que le permita a las madres estudiantes recuperar sus ausencias a clases justificadas por atender cuestiones de crianza.